Tras la manifiesta preocupación de Estados Unidos por la fiebre aftosa que amenaza la producción de carne vacuna argentina, el gobierno de Donald Trump analiza elevar la cuota de importación de carne vacuna argentina desde las 20.000 toneladas por año a 80.000 toneladas.
Funcionarios de Trump informaron que se negocia cuadriplicar el cupo anual para la carne argentina. Fue en conversaciones con legisladores republicanos y representantes del sector agrícola norteamericano, según el sitio Político y la agencia Bloomberg ya lo da como un hecho.
Según el Ministerio de Economía, Argentina tiene un cupo tarifario anual “carne deshuesada, fresca, enfriada o congelada” por 20.000 toneladas.
"La administración Trump dio a conocer un plan destinado a impulsar la actividad ganadera y fortalecer la producción interna de carne vacuna, al tiempo que aumentó la cuota de importaciones de carne proveniente de Argentina", asegura un cable de la agencia Bloomberg.
El paquete, publicado en el sitio web del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), incluye medidas para facilitar el pastoreo de ganado en tierras federales, incrementar los subsidios al seguro y reducir los costos de los pequeños procesadores.
En medio de su búsqueda por disminuir los precios de la carne, Trump “está incrementando cuatro veces la cuota arancelaria para la carne argentina, llevándola a 80.000 toneladas métricas (88.185 toneladas) al año”, según le dijo un funcionario de la Casa Blanca a Bloomberg.
La medida se conoció al tiempo que el gobierno de Donald Trump enfrenta críticas de grupos de ganaderos de su país por un plan para importar más carne de Argentina y a eso se le suma la manifiesta preocupación por la fiebre aftosa, un problema por el que la secretaria de Agricultura estadounidense, Brooke Rollins, había expresado su resquemor.
Rollins habló de la preocupación de su país por la enfermedad que circula entre los animales en Argentina, lo que generaría que tengan una mayor cautela a la hora de importar carne vacuna. Lo que tuvo su correlato en la reacción del campo argentino. El titular de la Sociedad Rural Argentina, Nicolás Pino, salió al cruce: "La señora está mal informada". El último foco de aftosa en argentina data de febrero de 2006.
"A la señora habría que decirle que hace más de 20 o 30 años que, por suerte, en Argentina no tenemos ningún problema con esa enfermedad que tanto daño le hace a la ganadería. La verdad es que si no existe eso es porque trabajamos bien, de manera consciente. Entonces, vamos a creer que fue un comentario, que fue un error", insistió el titular de la SRA.
En una entrevista televisiva, Rollins aseguró que Estados Unidos consume alrededor de 12 millones de toneladas métricas de carne bovina al año, y 10 de esos 12 son de producción local.
“Los otros dos millones se producen en el extranjero y hay diferentes partes de eso. Está McDonald’s y la carne molida versus los cortes musculares reales, que son para muchos estadounidenses la parte saludable de esto”, explicó.
El representante comercial de Estados Unidos, Jamieson Greer, que es el funcionario que negocia un acuerdo comercial con representantes argentinos, dijo en una entrevista el lunes que tiene el celular abarrotado de llamadas de legisladores republicanos preocupados por el tema, pero que no ve “toneladas de carne extranjera ingresando a Estados Unidos”.
"No veo un mundo en el que haya enormes, ya sabes, millones y millones de toneladas métricas inundando este mercado", dijo Greer a CNBC. "Eso simplemente no es parte del programa".
A Greer le preguntaron sobre las críticas de los ganaderos, que están viviendo un momento complicado y ahora se enteran de que van a importar carne argentina. “He escuchado que ha habido cierta controversia al respecto. Si miras mi celular, verás a varios senadores y representantes republicanos que me están llamando por eso. La realidad es que, cada año, importamos mucha carne. Consumimos alrededor de 12 millones de toneladas métricas de carne de res al año. También importamos mucha carne y exportamos mucha. Y el presidente también ha estado obteniendo acceso al mercado extranjero para la carne”, dijo el funcionario.
“Importamos una cantidad desde Argentina cada año. El presidente ha hablado de bajar los precios de la carne de res. No veo un mundo en el que haya enormes, millones y millones de toneladas inundando este mercado. Quiero decir, eso simplemente no es, eso simplemente no es parte del programa”, explicó.
La decisión de importar carne argentina ha provocado criticas de asociaciones ganaderas y los legisladores republicanos que provienen de estados ganaderos han alzado la voz públicamente, pero también en gestiones puntuales con funcionarios del área y en Casa Blanca.
En un comunicado, la National Cattlemen´s Beef Association, fundada en 1898, dijo: “Los ganaderos no pueden apoyar al presidente Trump mientras socava el futuro de las familias de agricultores y ganaderos al importar carne argentina. Es imperativo que el presidente Trump y la secretaria Rollins permitan que los mercados ganaderos funcionen sin interferencias”. “Le pedimos que abandone este esfuerzo por manipular los mercados”, agregaron.
Bill Bullard, director ejecutivo de R-CALF USA, la asociación ganadera más importante de EE.UU., dice que importar más carne de vaca es una curita a corto plazo que será perjudicial para la salud a largo plazo de la industria ganadera. "Instamos al presidente a proteger a la industria nacional de las importaciones que deprimen los precios excesivos, para que nuestra industria pueda reconstruirse y expandirse para satisfacer el consumo interno", dijo.
"Intentar reducir los precios internos de la carne de res simplemente invitando a más importaciones exacerbará y acelerará el desmantelamiento en curso de la cadena de suministro nacional de carne”, agregó.
Senadores republicanos como Thomas Massie, rechazaron la medida. “Esto no es America First!", dijo en relación al slogan de campaña de Trump, Estados Unidos Primero. "No necesitamos inundar Estados Unidos con carne de Argentina luego de que nuestros granjeros han estado luchando por tantos años”, agregó.
En tanto, el presidente no parece dispuesto a cambiar su política. En un posteo en Truth Social, Trump se refirió directamente al sector: “Los ganaderos, a quien amo, no entienden que por la única razón que les va tan bien, por primera vez en décadas, es porque coloqué tarifas a la carne que viene a los Estados Unidos, incluida un 50% de las tarifas a Brasil. Si no fuera por mí, les estaría yendo como en los últimos 20 años, ¡terrible! Sería bueno que entendieran eso y que también bajaran los precios”
Publicado: 30 de octubre de 2025
Fuente: Clarín Rural
Atrás
13-11-2025
06-11-2025