El gobierno ha lanzado una consulta para cambiar las estrictas normas actuales de la UE
La edición genética de cultivos y ganado pronto podría permitirse en Inglaterra por primera vez bajo una consulta lanzada por el gobierno el jueves.
Los ministros dijeron que cambiar las estrictas reglas actuales, que se originan en la UE y hacen que la edición de genes para cultivos y ganado sea casi imposible, traerá beneficios generalizados a consumidores y agricultores, incluidos alimentos más saludables, mejoras ambientales y un mejor bienestar animal.
Pero algunos grupos ambientales y de bienestar animal expresaron su preocupación de que flexibilizar las reglas podría conducir a un menor bienestar animal, por ejemplo, si la tecnología se usaba para promover un crecimiento más rápido que la salud animal, o para permitir que el ganado se mantenga en condiciones de hacinamiento.
La edición de genes implica cortar y empalmar secciones de ADN dentro de un solo genoma para producir cambios que antes solo eran posibles mediante la reproducción selectiva prolongada de plantas y animales. Este es un proceso diferente de la modificación genética, que implica la introducción de ADN de una especie en otra, y que seguirá estando sujeto a una prohibición casi total.
George Eustice, secretario de Estado de Medio Ambiente, Alimentación y Asuntos Rurales, dijo: “La edición genética tiene la capacidad de aprovechar los recursos genéticos que nos ha proporcionado la madre naturaleza para hacer frente a los desafíos de nuestra época. Esto incluye mejorar los cultivos, reducir los costos para los agricultores y los impactos en el medio ambiente, y ayudarnos a todos a adaptarnos a los desafíos del cambio climático”.
Mediante la edición de genes, se podrían desarrollar cultivos que requieran menos pesticidas o fertilizantes, o que tengan propiedades nutricionales mejoradas. Por ejemplo, recientemente se ha autorizado la venta de tomates que pueden reducir la presión arterial en Japón. Los genes animales también podrían editarse de manera que permitan la cría de ganado resistente a enfermedades clave, lo que reduciría la necesidad de antibióticos y, por lo tanto, la probabilidad de desarrollar superbacterias resistentes.
Sin embargo, Peter Stevenson, asesor principal de políticas del grupo de campaña Compassion in World Farming, dijo que las formas en que se había criado el ganado para obtener características rentables en el pasado sugerían que el desarrollo de la edición genética sería perjudicial para los animales. Señaló la selección genética para pollos de engorde, en la que las tasas de crecimiento rápido daban lugar a anomalías en las patas y cojera, y en las gallinas ponedoras, la selección para una alta producción de huevos causaba osteoporosis, lo que dejaba a las gallinas vulnerables a fracturas óseas.
La cría de animales resistentes a enfermedades solo alentaría a los agricultores a sembrarlos de manera más intensiva, agregó, lo que provocaría hacinamiento y un menor bienestar animal. “Esto nos está empujando por la ruta de la agricultura industrial”, advirtió. "Está afianzando un sistema de agricultura anticuado que sería mejor que abandonemos".
Gareth Morgan, jefe de agricultura de la Soil Association, dijo: “Cuestionamos la velocidad con la que el gobierno está utilizando el Brexit para perseguir una agenda de desregulación en esta área. Es vital que los ciudadanos y agricultores que no deseen comer o cultivar cultivos o animales modificados genéticamente reciban una protección adecuada”.
El profesor Gideon Henderson, científico jefe de Defra, dijo que el gobierno había dejado claro su compromiso de mantener los estándares de bienestar animal: "La motivación para esto no es reducir los estándares de bienestar animal, se trata de los beneficios".
La edición de genes ha sido posible gracias al desarrollo de herramientas como Crispr-Cas9, que permite a los científicos apuntar con precisión a secciones de ADN, eliminarlas o cambiarlas, o activar o desactivar ciertos genes. Desarrollado en 2012, Crispr es barato y se ha vuelto muy utilizado entre los científicos.
Pero el 2018, la corte de justicia europea dictaminó de manera controvertida que la edición de genes era esencialmente lo mismo que la modificación genética y debería estar sujeta a las mismas reglas estrictas. Los cultivos transgénicos están sujetos a una prohibición casi total en la UE, aunque algunos han recibido permisos.
Henderson dijo que permitir la edición de genes en Inglaterra no debería afectar el comercio de productos agrícolas con la UE, el mercado más grande para los agricultores británicos. “Deberá tenerse en cuenta en nuestras exportaciones a la UE: hay formas de etiquetar los cultivos editados genéticamente, de modo que puedan dirigirse a los mercados donde podemos vender”, dijo. "No obstaculizará el comercio y puede mejorarlo significativamente en algunos casos [con otros países]".
Muchos científicos acogieron con satisfacción la consulta del gobierno, que se prolongará durante 10 semanas hasta el 17 de marzo. Huw Jones, profesor de genómica traslacional para el fitomejoramiento en la Universidad de Aberystwyth, dijo: “Necesitamos alimentos y agricultura, pero también los necesitamos para dejar de dañar el planeta. Una combinación de una mejor gestión de la tierra y mejores cultivos puede lograrlo. En su forma más simple, la edición de genes es simplemente una forma más rápida de encontrar la variación genética producida por procesos naturales ".
Mick Watson, profesor de bioinformática y biología computacional en el Instituto Roslin de la Universidad de Edimburgo, dijo: “Además de mejorar la capacidad de los animales para responder a enfermedades, la edición de genes también podría usarse para crear animales más sanos y en forma con estándares más altos de bienestar de los animales. [Esto] podría colocar la tecnología de punta en el corazón de la mejora ganadera del Reino Unido".
La Unión Nacional de Agricultores también acogió con agrado la consulta, que se expondrá en detalle el jueves durante la Conferencia de Agricultura de Oxford en línea. Tom Bradshaw, vicepresidente de la NFU, dijo: “Las nuevas técnicas de reproducción de precisión, como la edición de genes, tienen el potencial de ofrecer enormes beneficios para la agricultura y el medio ambiente del Reino Unido y son absolutamente críticas para ayudarnos a lograr nuestra ambición de cero cero frente al cambio climático".
Traducción: Cecilia González P.
Publicado: 12 de enero de 2021
Fuente: The Guardian
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